Mi último trabajo ha sido este retrato en cuatro telas, que he regalado a mi hijo.
Tengo que deciros que hacer estos retratos es un reto muy divertido, es mas un trabajo manual, al que si se le pone la paciencia y el mimo necesarios, tiene unos resultados estupendos.
No se invierte demasiado tiempo en realizarlo, es posible hacerlo en un dia o dos, y es un regalo totalmente personalizado, muy al estilo Andy Warhol.
No siempre es necesario usar tonos grises, se puede elegir entre gamas de azules, rojos, morados...en fin a gusto del consumidor, pero a mi me gusta en estos tonos, Tambien es cierto que sólo he hecho dos retratos, igual el proximo...¿quien sabe?.
Esta fotocopia está realizada aplicando un tratamiento informático a la foto que va a utilizarse, de forma que los colores quedan reducidos a cuatro solamente. Para este proceso siempre echo mano de mi amiga Jacqueline Bahí que fue quien me enseño esta técnica, y es quien transforma la foto original para poder hacer el proceso.
La parte posterior es la que veis aquí abajo, y esta realizada con una tela estampada en tono oscuro.
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